Estimados Colegas:
Hoy se hace necesario extender una vez más, un saludo de Felicitación a todos los galenos en su día. Aquellos titanes que apartaron de si, el velo de privacidad y compartieron como se señala en “Los Consejos de Esculapio” la figura pública de ser reconocidos por el pueblo como “doctores”; médicos del pueblo que junto al Cura y al Maestro entre otras dignas profesiones constituyen pilares fundamentales de la sociedad; sociedad que cada día se transforma y exige a profundidad estar a la altura de un pueblo que crece en consciencia para ejercer directamente la gestión de las políticas públicas y su participación protagónica en los proyectos que darán respuestas a sus necesidades y problemas.
¡Innegables los avances que en materia de salud ha tenido nuestra Patria!
De una concepción de salud diseñada anteriormente para atender en forma individual, focalizada y excluyente hacia la creación de un Sistema Publico Nacional de Salud con principios de universalidad, integralidad, equidad, gratuidad, integración social y solidaridad con la participación de la comunidad organizada. Sin embargo, ¡ queda mucho por hacer !.
Es necesario reflexionar que a quienes les servimos son hijos de “Flora y Ceferino” buscando la cura para sus pesares, por lo que debemos rectificar nuestras experiencias y reimpulsar la marcha bajo un enfoque humanista, combatiendo las inequidades, rescatando lo público en función del interés colectivo y garantizando el acceso de todos y todas a los servicios de Salud.
Nuestra profesión no es un rango que adquirimos al recibirnos como médicos; sino un privilegio para servir que debe estar por encima de los intereses económicos! El llamado - que más que un llamado es una súplica de nuestro pueblo - es atender a los pacientes como si se tratase de un familiar bajo un enfoque bio-psicosocial reconociendo la integralidad y la dignidad humana, y conjuntamente los niveles gerenciales y operativos del equipo de salud participar en la promoción de calidad de vida y salud para nuestro pueblo.
Por otro lado hay que considerar lo más importante que hacemos cada día los Médicos y Medicas: ¡El invaluable esfuerzo por salvar vida aplicando los conocimientos científicos y tecnológicos y con altruismo reconocidos mundialmente y rescatando el poderoso e innegable requisito como es servir con calidad. Esto se evidencia con la creación del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, el Hospital Cardiológico Infantil Dr. Gilberto Rodríguez Ochoa, la Sala de Fisiatría y Rehabilitación y el Bunker de Radioterapia del Hospital Dr. Miguel Oraá, la rehabilitación de la Sala de Partos y Servicios de Hospitalización de Cirugía, Maternidad y Pediatría del Hospital Universitario Dr. Jesús María Casal Ramos.
Abandonar diferencias de etnia, credo, género, clase social y política y avanzar en la construcción de un Sistema Publico Nacional de Salud de calidad que permita garantizar el ejercicio del derecho a la salud como un derecho fundamental a la vida.
A recordar que la salud no es tarea individual sino colectiva donde todos y todas somos corresponsables.
A dialogar y discutir constructivamente nuestras debilidades, a solventarlas con nuestras fortalezas.
A marchar junto al obrero y al soldado, al campesino y el estudiante para sacar al latero de su saco de miserias!
Y por último a que nuestra generación de relevo, deje atrás los prejuicios que caracterizan nuestra humana naturaleza y se integren respetando al otro como legitimo otro!
Entendiendo el honorable Apostolado que entraña la noble misión de llamarse Médico estaremos construyendo Patria y encaminados a lo que decía Simón Bolívar “La Suprema Felicidad Social”.
Reconocimientos y Felicitaciones a quienes abren desde hoy una nueva página de la Historia y miran cada día el inmenso compromiso que representa el arte de curar almas, cuerpos y conciencias.
“Médicos de Ciencia y Conciencia”
Dirección Regional de Salud del Estado Portuguesa